En el verano, el cuidado de los pies debería convertirse en una de nuestras principales prioridades, ya que es la época perfecta del año para poder lucirlos con diferentes tipos de calzados, desde luego nada recomendados en otras estaciones. Es importante partir desde el principio para que nos demos cuenta de la importancia que tiene un correcto cuidado de los pies, no sólo por estética, sino también, para evitar enfermedades, durezas, callos,... al fin y al cabo, los pies sufren a diario, por llevar nuestro peso, por el uso de calzado no adecuado,...
Sin el cuidado adecuado, los pies suelen sufrir de callosidades, sequedad y agrietamientos y esto sin duda, se debe al descuido, falta de hidratación, mantenimiento lo cual trae problemas físicos como estéticos. Es entendible que durante el resto del año les prestemos menos atención debido al trabajo, ocupaciones,... en las que nos olvidamos que tenemos cosas tan simples que hacer y lo dejamos pasar.