Los probióticos son un tipo de ingrediente alimentario constituidos por microorganismos vivos, los mismos que forman parte de nuestra flora intestinal. Estos microorganismos ingeridos en cantidades suficientes, a través de los alimentos que los contienen, producen efectos muy beneficiosos en nuestra salud, ya que contribuyen a mejorar la flora intestinal y benefician nuestro sistema inmune de ciertas infecciones, ya sean digestivas como generales.
El consumo de probióticos, como parte de una dieta equilibrada y siempre acompañados de un estilo de vida sana y saludable, nos ofrecen la posibilidad de mejorar la salud y prevenir enfermedades, siendo muy beneficiosos en niños, mujeres embarazadas y ancianos.
Una dosis adecuada de probióticos nos ayudará a aumentar el estímulo sobre las inmunoglobinas A que son las que intervienen en los procesos de defensa del cuerpo, favoreciendo la producción de vitaminas, enzimas, ácidos grasos,...
Alimentos que contienen probióticos:
- La leche materna contribuye especialmente en el desarrollo de la flora probiótica.
- Alimentos como el yogurt u otros a base de leche fermentada también los continenen.
- Ciertos preparados que combinan bebidas lácteas con concentrados de cepas de lactobacillus.
El consumo de los probióticos o cualquier otro tipo de alimento funcional no debe sustituir nunca una dieta equilibrada. Es importante que nuestra dieta sea variada y rica en frutas, verduras, hortalizas, cereales integrales, legumbres, lácteos y pescado.