Erradamente se considera a la piel acneica como un síntoma común único de la adolescencia que debe desaparecer por sí sola alcanzada la mayoría de edad. Aunque sea cierto hasta cierto punto, no es razón suficiente para que dejemos de un lado el cuidado del rostro en este aspecto, ya que el acné puede permanecer después de la adolescencia.
El acné surge en las personas de piel grasa, esto es un estado cutáneo que se agrava en la adolescencia pero que en algunos adultos se vuelve un estado natural, haciendo que sufran de acné por mucho más tiempo. Así pues, la piel acneica es una condición ligada al grado graso de la dermis.